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57 Las legumbres (por ejemplo, guisantes, habas, lentejas, altramuces) son fuentes de proteínas, hidratos de carbono y fibra, y deben consumirse en 1 ó 2 raciones, que representan el 4% del peso en la dieta diaria. Las grasas (por ejemplo, aceite de oliva, mantequilla o margarina) constituyen el grupo más pequeño de la Pirámide de la Alimentación Saludable, con una recomendación de consumo reducido y seleccionado (debido a su elevada carga calórica), de 1 a 3 raciones (2% del peso en la dieta diaria). Son grandes proveedores de energía y vitaminas liposolubles. En definitiva, los hábitos alimentarios saludables pasan por adoptar una dieta diversificada, rica en frutas, verduras y cereales integrales, evitando el azúcar, la sal y las grasas, así como los alimentos procesados. La alfabetización alimentaria también debería ser un aspecto importante a tener en cuenta, ya que, sin la menor duda, conocer los diferentes alimentos y su distribución en la Pirámide, entender y descodificar las etiquetas y comprender claramente la relación entre alimentación y salud es un gran paso para cambiar positivamente los hábitos alimentarios, elegir y seleccionar mejores opciones nutricionales y construir una sociedad más autónoma en su proceso de toma de decisiones en materia de salud. En la siguiente imagen, te ofrecemos algunas recomendaciones para adoptar una dieta saludable y disfrutar de los beneficios asociados a ella.